Muchos son los equipos que transitaron por la máxima categoría del automovilismo mundial. Algunos pasaron con gloria, otros sobrevivieron unas pocas temporadas y otros duraron mucho tiempo, pero la economía y la potencia de otras escuderías hicieron que den un paso al costado. Este último es el caso de Minardi. Sus monoplazas rodaron en los circuitos de todo el mundo durante 21 años, hasta que en el 2005, arrastrados por diversas crisis económicas debieron alejarse de la Fórmula 1.
Todo el mundo recuerda que estuvimos en primera línea en Phoenix en 1990 y aunque jugaron su papel los neumáticos Pirelli de clasificación, hubo otros pilotos y equipos que los tuvieron también. Me gustaban esos trazados americanos porque solían ser urbanos y esto ayudaba a minimizar las diferencias entre los mejores y nosotros“, sostiene el dueño de la escudería Giancarlo Minardi.
Minardi debutó en 1985. Recién en 1988 de la mano de Pierluigi Martini, Minardi obtuvo sus primeros puntos en un campeonato de Fórmula 1. Si bien la escudería siempre fue una más de los coches de cola, su dueño recuerda las pocas carreras en las que ha logrado marcar una diferencia.
“Terminamos quintos en Silverstone, lo cual fue una gran sorpresa ya que nunca éramos rápidos aquí, lideramos en Portugal y finalizamos la temporada con un sexto puesto en Australia. Fue una locura, una carrera con lluvia y la cual fue la única de toda mi carrera en Minardi donde puedo decir de forma honesta que tuvimos oportunidad de ganar“, sostiene Martini sobre su pasado en Minardi.
Menguada por grandes equipos durante los noventa, como Ferrari, McLaren y Williams, Minardi se dedicó a ser una escudería de prueba para muchos jóvenes pilotos de la Fórmula 1 que deseaban formar parte de ella. Sin embargo a pesar de haberla dirigido durante 15 años, Minardi vendió su emprendimiento a Paul Stoddard; manteniéndose igualmente como director de la escudería.
“Minardi nunca fue un equipo grande, pero fue uno muy popular y me siento muy agradecido por el apoyo que tuve”, ha señalado Martini. “El hecho de que estemos hablando de ello ahora tras todos estos años dice algo en sí mismo“, concluye Minardi.
Tanto fue el deterioro de la escudería, que ya sobre sus últimos años su principal fuente de ingresos era el capital que aportaban los pilotos para correr en la Fórmula 1.
Varios fueron las escuderías que tuvieron pasos fugaces por la Fórmula 1, pero si de algo se está seguro es que Minardi batalló hasta el final para poder estar año tras año en la parrilla. Con la vuelta de equipos como Renault a la categoría, los recuerdos de aquellos monoplazas que nos han dejado, vuelven a cobrar vida.
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