Ferrari, Montezemolo y su disparo en el pie con el fichaje de Raikkonen…
El verano del 2013 será recordado por siempre en Ferrari como la época en la que su presidente decidió que la Suderia se pegaría por primera vez un tiro en el pie para el año siguiente, en vez de resolver los problemas que tenía de una vez por todas. Era fácil detectar donde estaba el problema: había cambiado un buen puñado de técnicos por otros de prestigio y el resultado seguía siendo el mismo: su primer espada siempre se quedaba a las puertas del éxito a final de año, sacando una montaña de puntos a su compañero de equipo. El piloto, por tanto, no parecía ser el problema, y sí la manera de dirigir todo un equipo que por muchos cambios que sufriese, obtenía el mismo resultado un año tras otro. En una especie de huida hacia adelante, no se le ocurrió otra cosa que fichar a una nueva estrella, en una especie de mensaje cifrado (aunque su contenido se viera a km de distancia) hacia su piloto en la que se podía leer entre línea: no creo que estés dando el 100% por este equipo. Las consecuencias, aunque se dijeran varias teorías en ese momento, apenas se adivinarían hasta el día de hoy…
Domingo 16 de Marzo de 2014: los resultados de su apuesta han llegado. Y no, no nos estamos refiriendo a los resultados deportivos, sino a lo que implican de cara a su estrategia. Kimi Raikkonen, el tan ansiado fichaje del año pasado, termina 7º mientras que el piloto que en 2013 parecía que no lo daba todo pese a masacrar a su compañero de equipo, Alonso, termina 4º. En Calificación, de hecho, la cosa fue más dolorosa, con un 5º puesto del asturiano frente a un 12º del finlandés. ¿Y por qué estamos recalcando los resultados deportivos y diciendo que no es de lo que va?. Porque realmente es a la consecuencia de este hecho a lo que nos queremos referir realmente. Por un momento, ese movimiento y los inmediatos resultados revelan por fin donde está el problema, y no es en los pilotos. Su estrategia se revela como demoledoramente errónea, pues no sólo no le da la razón a su presidente sino que hace más fuerte al piloto al que quería poner en duda, aumentando su valor. De repente, se pasa de hacer creer que el piloto es un engranaje más en la maquinaria de Ferrari, que en cualquier momento puede contratar a cualquier otro piloto estrella para obtener los mismos o similares resultados, a hacer creer que realmente no hay otro piloto en la parrilla como el asturiano, que es el crack definitivo, y que ha vencido una vez más al compañero de equipo que le han puesto al lado. Si Massa no tenía crédito alguno desde hace bastante tiempo, en el caso de Raikkonen venía de luchar por el Campeonato con un modesto Lotus. Cada victoria de Fernando en su lucha contra Raikkonen es un disparo en el pie derecho del presidente de la Scuderia. El fichaje de Raikkonen, lejos de ser la solución, pone toda la presión en el equipo y quien lo dirige, pues demuestra que su presidente hizo el movimiento erróneo para solucionar los problemas de competitividad de su escudería. El año pasado todas las miradas apuntaban a quien gestionaba el equipo, Stefano Domenicalli, y lejos de reemplazarle para cambiar la forma en la que se dirigía la Scuderia, salvó esa pieza reemplazando otra por una ficha que no se necesitaba entonces. Montezemolo, no sólo no parece haber acertado con su movimiento, sino que ha hecho más fuerte la posición del hombre al que quería debilitar. Alonso parece ahora la única pieza que evita que Ferrari haga el ridículo año tras año. Sin sus resultados, Maranello hubiera ardido con los pobres resultados de Massa y los no muy diferentes que Raikkonen parece proporcionar ahora. De repente, Alonso parece ahora un Dios entre los mortales que campan por Maranello. Justo lo que quería evitar su presidente, que quería destacar que la escudería era más importante que el propio piloto y que en cualquier momento podía contratar a otro similar.
Hay toda una temporada para cambiar esta opinión, pero los tests de pretemporada y los primeros resultados parecen presagiar que Alonso se impondrá claramente al finlandés y que con independencia de si consigue o no obtener el Campeonato, la prensa lo estimará por encima del equipo, porque habrá batido a una referencia clara (un Campeón del Mundo) y habrá puesto de manifiesto que Ferrari sin él haría el ridículo año tras año. Su valor, en contra de lo pretendido, por tanto, aumentará exponencialmente mientras el del equipo bajará hacia el de las oscuras profundidades en la misma proporción. Un resultado totalmente opuesto al que se quería conseguir. Montezemolo se asegura un buen piloto por si Fernando hace las maletas, pero al misma tiempo incomoda innecesariamente a la única pieza que mantiene que el equipo pueda lucir unos resultados que no insulten la historia del equipo. Ferrari, en la actualidad, sufre una mayor presión porque a nadie le queda ya la duda de donde está el problema. Si el año pasado se pudo vender la duda, este año no será posible con un Alonso batiendo a Raikkonen y aún así no pasando de la 3ª línea de parrilla en las sesiones de los sábados. El coche no anda, no rinde, no se impone y no se ha convertido en una referencia pese a haber despedido a Aldo Costa y haber fichado a Pat Fry y James Allison, dos claras referencias en el apartado técnico y artífices de los grandes resultados que habían conseguido bajo su dirección tanto McLaren como Lotus. Ferrari tiene un año complicado por delante si no logra darle rápidamente la vuelta a la tortilla. La afición ya sólo tendría dos referencias a las que culpar si no se consiguen los resultados que Ferrari por historia merece desde hace tiempo: Montezemolo y Domenicalli. Ya no quedan más fichas a las que culpar del resultado salvo ellos dos. La estrategia de Montezemolo, lejos de resolver los problemas de competitividad del equipo, asegurando con ello la estancia de su mayor figura, no hace otra cosa que mostrarle la puerta de salida al mismo tiempo que se queda con una ficha de menos valor que la que se va. ¿Alonso de vuelta a Woking? Si se va, desde luego que sólo será por la incompetencia de su presidente, no por falta de agradecimiento del español hacia una escidería y un país al que el siempre ha querido con el corazón…
Fuente: http://web.autofm.es/2014/03/ferrari-mo ... n-el-pie/#