Cuando hablamos de gente “que tiene mucha suerte”, el término Dolorpasión, está, cuanto menos, relacionado. La historia que viene a continuación podría haber tenido un desenlace muy gore, pero afortunadamente, y casi sin explicación, no ha habido que lamentar daños personales. Este BMW Serie 5 letón circulaba a alta velocidad por autopista hasta que sufrió un leve percance.
Una pieza metálica de considerable tamaño se desprendió del vehículo precedente, saliendo disparada hacia el parabrisas de este coche. Lo primero que podríamos pensar, es que mata en el acto al conductor o le parte la cabeza. Afortunadamente para el inesperado protagonista, la pieza entró con un ángulo favorable y pasó por encima de él.
El conductor puede dar las gracias a BMW por utilizar una luna bastante resistente, por que a alta velocidad, existía la posibilidad de que saltase en pedazos, y no tiene pinta de ser nada agradable. Solventado el problema de la entrada, la pieza continuó su viaje muy cerca de su cabeza, tanto, que el reposacabezas quedó de testigo presencial:
Parece ser que no viajaba nadie en las plazas traseras, por que existía un riesgo salvaje de tragedia. La pieza quiso salir del habitáculo con un ángulo menos favorable, esta vez la luneta trasera casi se hace añicos, y abandonó el habitáculo. No sé cómo, el protagonista recuperó el cuerpo del delito y se expone en la última fotografía.
Si utilizo la palabra “acojonante”, seré un poco soez, pero me quedaré corto para describirlo. Eso es tener suerte y no el Gordo de la Primitiva. Me recuerda al caso de un alemán, que viajando apaciblemente por Autobahn a 250 Km/h con su Porsche Boxster, un pájaro se interpuso en su camino y le atravesó el parabrisas. Unos centímetros más cerca y hubiera habido una desgracia doble, por que el bicho no pudo contarlo.
FUENTE: Motorpasion.com
http://www.motorpasion.com/2008/01/06-e ... entrega-12