Vijay Mallya , propietario del equipo de Silverstone se convirtió en sospechoso para uno de estos días que Red Bull ha jugado en Rockingham, una pista británica que incluye un óvalo de alta velocidad y una sección interior. Para ello, el jefe de la Fuerza de la India envió un observador para espiar los movimientos del equipo campeón del mundo .
La sospecha es que el Red Bull de aprovechar estas ocasiones , a pesar de los acuerdos alcanzados entre los equipos, para desarrollar componentes destinados RB9 . Un alarmar al Force India habría sido el salto evidente de Red Bull después de las vacaciones de verano: Sebastian Vettel ganó todas las carreras de Bélgica hacia adelante .
Por supuesto, Helmut Marko , un gran consejero en Milton Keynes, ha tachado de tonterías estos artículos. Pero la cultura de la sospecha sigue vivo en la Fórmula Uno.
(Esta traducido por el traductor de Google).
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