Carrera interesante, más por su trascendencia en el Mundial que por lo visto en la pista, Suzuka es especial por muchas razones.
Nico ha estado impecable, es su único camino si quiere ser Campeón, sin errores, sin problemas y sin forzar su coche. Con este resultado ahora depende de sí mismo y de que la mecánica no le haga una gorda en las cuatro carreras que quedan. Si puede optar a ganarle la carrera a su compi, bien, pero si no, que no pierda los nervios y se pegue al alerón de Ham, que con ser segundo cuatro veces es campeón. Incluso puede permitirse ser tercero una de esas cuatro veces, por si hay algún torpedo en la salida y tal.
Verstappen esta vez sí ha sido el hombre de la carrera, con un ritmo excelente, una estrategia adecuada y resistiendo brillantemente al Mercedes de Ham. Hacía falta en la parrilla un piloto que supiera detener a Lewis, y ese es Max: todo el mundo cierra a Lewis demasiado pronto y Ham siempre adelanta en el último suspiro, con la frenada al límite marca de la casa. La única manera de detener a Ham es cerrarle en el último suspiro, como hizo Max delante de la Chicane Casio. Impecable. Hasta ahora sólo teníamos a un piloto capaz de entorpecer los adelantamientos de Lewis: Massa, pero claro, a base de buscar el contacto y el golpe.
Hamilton está perdiendo el Mundial con sus errores, sumados a los fallos mecánicos de su coche. Una combinación que no se dará siempre, de ahí la trascendencia de que Nico aproveche esta oportunidad de oro. Teniendo el mejor coche de la parrilla con diferencia, eso de hacer primero y segundo en clasificación con el mapa motor en modo "Abuela de Toto al volante" da una imagen clara de la supremacía de Mercedes estos tres años. Merecen ser campeones de constructores. Aunque claro, con estas normas que arbitrariamente han evitado una evolución en estos tres años es más justo considerarlos campeones de este Campeonato de tres años, que tres veces campeones.
En cualquier caso Lewis con el mejor coche de la parrilla y estando un peldaño por encima de su compañero, único rival al título durante tres años, está a estas alturas sin posibilidad de ganar este Mundial sin depender de nadie más que de él. Necesita un error de Nico o un fallo grave del coche de Rosberg, ganar las cuatro carreras no le basta ya.
Una vez más falla en la salida, recuerda Lewis, el que no quiere que ganes el Mundial eres tú, no le eches la culpa a nadie más. Queda octavo en Suzuka varias vueltas y gracias a fallos de rivales y abandonar el mapa motor "Abuela de Toto al volante" acaba en el podio. Y menos mal que Max estaba allí, que si no era doblete plateado.
Después llega el Pitufo Gruñón, al que le han pitufado a base de bien desde su muro. No estaba haciendo mala carrera, había una oportunidad de podio y para explicar lo que hizo Ferrari entonces nos quedan dos opciones:
-Los encargados de planificar las estrategias no están cualificados, sin descartar que haya una serpiente de siete cabezas tratando de ir en siete direcciones distintas... a la vez.
-Se han creído su propia propaganda, o peor, se creyeron después del sábado que de verdad estaban a dos décimas de Mercedes, sin acordarse de que iban en modo "Abuelita de Toto al volante" para no romper más motores.
En cualquier caso, a Gruñón le dejan en pista más de lo debido para sacarle detrás de un Mercedes pilotado por Hamilton. Repito:
un Mercedes pilotado por Hamilton para que lo adelantase, abriese hueco y luego aguantase con unas ruedas que en esta pista fría no habían funcionado ni durado de ninguna de las maneras. ¿Qué esperaban que ocurriera?
Sí, vale, entrar antes, colocar duras (o medias) y aguantar al final a un Mercedes pilotado por Hamilton era chungo, pero estábamos en Suzuka, es de esos circuitos donde te puedes agarrar a la posición con más o menos posibilidades, como demostró Max. Tremendo.
Kimi hizo una buena carrera, con buen ritmo, como suele ocurrirle en Suzuka, la estrategia no era mala, pero claro, no llevaba un Mercedes y empezar octavo en Suzuka es estar condenado a no llegar al podio. Seguimos a un Universo de Mercedes.
Ricciardo, normalmente sólido, tuvo una mala carrera, no tuvo ritmo, no acertó con la estrategia, su equipo le hizo un mal pit-stop, un desastre.
Pérez, que empezó muy bien, fué poco a poco descendiendo a dónde su montura le corresponde. De todos modos como siempre una carrera sólida del mexicano.
Detrás en riguroso orden por equipos su compi Hulk, nuevamente gris y sin grandes alardes.
Luego llegan los chicos de Williams que, después de ver el buen resultado de Malaysia de Bottas, decidieron ir otra vez a una parada con los dos. Puntuaron, y eso significa que insistirán en esta estrategia tan dinámica en las próximas carreras. Mal negocio en las próximas tres pistas me temo, ya veremos.
Grosjean se quedó sin puntos después de una clasificación que invitaba al optimismo en Haas, pero al final en carrera han sido bastante irregulares.
Los Mclaren han estado desastrosos en "su" circuito, y con todos los tokens puestos sobre la mesa. Necesitan unos cuantos "wishes" cumplidos para terminar de salir del pozo.
Y en Suzuka no ha abandonado un sólo coche. Alucinante.
En dos semanas llegamos a Texas, con una primera curva que puede cambiar el Mundial de forma dramática. Al menos en esta situación hay incertidumbre sobre quién será Campeón al final (con las posiciones al revés estaría todo el pescado vendido, y lo sabemos) y eso es casi refrescante a estas alturas de este Mundial de tres años.
Saludos