Hamilton, con su teléfono móvil, durante la rueda de prensa en Suzuka.
Lewis Hamilton dedicó más tiempo a bromear en las redes sociales que a atender a los periodistas durante la rueda de prensa oficial previa al GP de Japón, donde necesita recortar la desventaja respecto a su compañero Nico Rosberg, líder del Mundial. El vigente campeón del mundo se entretuvo subiendo imágenes a Snapchat, tanto suyas como de Carlos Sainz. "El tipo ahí arriba no quiere que gane", comentó Hamilton con brevedad antes de volver a sumergirse en su teléfono móvil, donde bromeó con el piloto madrileño, a quien colocó unos efectos que simulaban orejas de conejo.Sentado en la primera línea del atril que monta la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), el triple campeón mundial optó por las risas antes que las preguntas de la prensa sobre su batalla con Rosberg.
Los cigüeñales y la presión del aceiteTras quedar fuera en Sepang por un defecto en el motor cuando figuraba como líder destacado, Hamilton debe remontar 23 puntos en las cinco carreras restantes. Si Rosberg suma otro triunfo en Japón, en las cuatro citas restantes le bastará con un segundo puesto para asegurarse su primer título. "Eso no es algo que me anime especialmente", comentó el líder del campeonato. "Es en estas situaciones cuando Lewis vuelve con más fuerza".
Sainz y Hamilton, con los filtros de Snapchat del piloto británico.
Hay que recordar que en Suzuka Mercedes finalmente montará propulsores viejos, en lugar de las unidades nuevas que habían anunciado. La escudería alemana sigue examinando sus coches en busca de la avería que forzó el abandono de Hamilton en Sepang, tras sólo 618 kilómetros y sin previo aviso. Al parecer, además de la bajada en la presión del aceite, el fallo pudo debferse a un fallo en los cigüeñales. En un primer momento, Hamilton lanzó insinuaciones de sabotaje a su propio equipo, pero poco después rebajó el tono de sus palabras.
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