Bernie Ecclestone ha rechazado comparar a Sebastian Vettel con Michael Schumacher. Después de una buena primera temporada con Ferrari, el tetracampeón del mundo fue comparado con su compatriota y mentor; pero tras un segundo año complicado sin victorias y mucho nerviosismo en pista, Vettel muestra una ansiedad que no tuvo el Kaiser en sus años de sequía previos al dominio de principios del 2000.
Actualmente, Ferrari se encuentra en una crisis de resultados tras fracasar con el objetivo de ser campeones y batir a Mercedes esta temporada, para ser superados por Red Bull. Uno de los miembros más criticados es Vettel, quien es señalado por la prensa por su mal rendimiento, pues Räikkönen le ha superado en muchas más ocasiones que en 2015.
Preguntado sobre si se puede comparar al expiloto de Red Bull con Schumacher, Ecclestone respondió. "No. No tiene el carisma y el poder que tenía Michael. Vettel no es Michael. Él era especial". El mandamás de la F1 también ha reaccionado a la petición de la vuelta de las trampas de gravilla tras los sucesos de México y las quejas de Vettel sobre los límites de pista. "Quitamos la gravilla porque entonces tienes camiones y grúas en la pista removiendo los coches que han quedado estancados".
A pesar del éxito reciente de Alemania en la F1, con los cuatro títulos seguidos de Vettel y el dominio actual de Mercedes con Rosberg con opciones de ser campeón en Brasil, el futuro del GP en ese país peligra. Ecclestone ha advertido en más de una ocasión que deben pagar más si quieren mantener su carrera.
"El organizador, ya sea Hockenheim o Nürburgring, no puede ni pagar un canon reducido. No es justo para los otros organizadores en Europa si hago una excepción. Quizá son los alemanes, que no les gusta la Fórmula 1". A pesar de sus palabras, el octogenario asegura que la F1 en la televisión alemana no peligra con Liberty Media. "No, la RTL tendrá la Fórmula 1 de nuevo durante los próximos tres años".
Por último, Ecclestone regresará este fin de semana en Brasil, donde su suegra fue secuestrada en verano. A pesar de ello, Bernie no planea aumentar las medidas de seguridad. "No tengo miedo. ¿Por qué debería tenerlo? En los últimos ochos años, este fue uno de los mayores secuestros. Brasil no es tan peligroso como la gente cree. No [implementaré más seguridad]. No hay necesidad de sentir miedo o preocuparse".
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