El martillo es el 911. Un coche con el motor colocado detrás del eje trasero. Eso significa que el reparto de pesos es poco favorable.
En un coche económico y de diario no es mucho problema, pero para un deportivo el equilibrio de masas significa no sacrificar adherencia en vencer las inercias del vehículo. Coje un martillo y hazlo girar en el aire. ¿A que lo has cogido por el tercio del mango más cercano a la cabeza? Cógelo por el centro del mango y gíralo. Verás que tienes que hacer un esfuerzo con la muñeca para inciar el movimiento, para pararlo e incluso para mantenerlo girando. La inercia de la cabeza te obliga a gastar fuerza en mantener el equilibrio.
Pues en un coche el tener esa masa lejos del centro y no compensada implica que te cuesta ponerla en marcha al girar. Inicialmente el coche es subvirador (no quiere tomar la curva) Pero cuando has terminado de entrar en la curva y tienes que mantener la trayectoria esta masa sigue empeñada en girar y el coche pasa a sobrevirar. Si asustado por el primer efecto has girado de más el volante se sumará al sobreviraje y el trompo está servido.
Para mantener toda este baile se necesita de una fuerza que sale de la adherencia de las ruedas. Y la adherencia es como un sueldo: tienes un dinero determinado para pasar el mes, si te gastas en vicios la mitad, tienes menos para comer. La adherencia que gastas manteniendo la actitud del vehículo no la tendrás para tomar la curva y tendrás un coche menos efectivo. Es la razón por la que frenar en curva es peligroso, te quedas sin adherencia para tomar la curva.
Claro, es un coche más "divertido" porque los subidones de adrenalina que te da cuando ves que no entras y luego te vas al vértice a todo trapo son impagables (para algunos)
Sin embargo, los que prueban un Cayman, también Porsche, pero con el motor central (delante del eje trasero) ven que el coche toma las curvas con una nobleza y efectividad que casi aburre. Hace falta ir muy a lo bestia para llevarte un susto con un Cayman. Será por eso que siguen prefiriendo el Martillo los fanboys.
Aún así, Porsche disimuladamente anda desplazando el motor del 911 hacia delante en cada nueva generación, para no perder el afecto de los fanboys, pero hacer un coche más racional. A los de Harley Davidson les pasó algo parecido con el sonido de sus motos. Resulta que el sonido era fruto de un fallo de diseño del motor original. Cuando sacaron una moto sin ese defecto y por tanto si el sonido Harley, nadie las quiso, así que siguen fabricando motores con defecto.
Este mal reparto de masas tiene una variante más leve: los coches que están equilibrados pero no tienen la masa centrada: Son perezosos para girar o dejar de girar, pero una vez tomada una trayectoria son estables. De ahí que se evite poner peso en los extremos del vehículo. Reducir peso de ruedas, frenos y auxiliares y llevar todo al centro todo lo posible te da un coche ágil y noble. Un coche que usa toda al adherencia de los neumáticos para tomar curvas y traccionar.
Un Cayman con la potencia de un 911 lo dejaría en ridículo, pero no se atreven en Porsche a matar a su mito... por mucho que vivan de furgonetas diesel con apariencia de todoterrenos como bien ha apuntado Meteoro.
Saludos