Raikkonen parece un piloto nuevo. Se le ve más cómodo con su Ferrari y a la vista están los resultados: dos cuartos puestos y un podio en cuatro carreras, mucho más de lo que consiguió el finlandés en 2014.
Con 45 puntos a estas alturas de la temporada está a punto de superar los 55 que sumó en todo el campeonato anterior, uno de los peores en la carrera del ex campeón mundial.
El SF15-T se adapta mucho mejor al estilo de conducción de Raikkonen. Y ahora sabemos por qué. El director deportivo de Ferrari, Maurizio Arrivabene, ha desvelado en declaraciones a 'Autosport' que pidió a los ingenieros y diseñadores de su equipo un coche a medida para el finlandés.
"Recuerdo que era 10 o 12 de diciembre. Estaba hablando con Resta (jefe de diseño) y Rory (consultor) y estábamos viendo una foto del coche", relató el ejecutivo italiano.
"Les pregunté qué podían hacer para transferir el peso un poco más hacia el tren delantero porque a Kimi le gusta sentir el coche de esta manera y a Vettel casi lo mismo. Dijeron que necesitaban seis meses y les pregunté si podían hacerlo en tres. Respondieron que tendrían que trabajar de día y de noche y les dije que yo trabajaría con ellos", explicó Arrivabene. "Hagámoslo", les animó.
El segundo puesto en Bahréin, entre los Mercedes de Hamilton y Rosberg, es el mejor resultado de Raikkonen desde su regreso a Ferrari en 2014, y su ritmo de carrera recordó al del campeón de 2007, el último Mundial conquistado por los bólidos rojos.
Su pilotaje preciso con el tren delantero era imposible con el F14-T del año pasado. "No podía meter el coche por donde quería y eso le frustraba. Estaba muy abatido", comentó a Marco Canseco en Bahréin una persona muy cercana al finlandés.
Este año todo ha cambiado. El rediseño de la geometría de la suspensión delantera en el SF15-T ha sido un bálsamo para su confianza. Ahora puede hacer lo que pretende y conoce mejor la mecánica hibrida que antes le parecía un enigma indescifrable.
Fuente: app para dispositivos móviles del diario deportivo marca