Cuando José Froilán González dio inicio a la leyenda

[enroba]

El 14 de julio de 1951 tiene una especial significación para el equipo Ferrari, ya que ese día una de sus máquinas ganó por vez primera un GP del Mundial, derrotando finalmente a Alfa Romeo, que -salvo en las pruebas disputadas en Indianápolis, donde no intervino- se había impuesto en las nueve competencia corridas en Europa desde la instauración del campeonato. Aunque, en realidad, su invicto venía desde bastante antes; más precisamente, desde 1946, a lo largo nada menos que de 27 presentaciones. Ese objetivo -vencer a las Alfetas-, era un verdadero anhelo para el "Commendatore" desde 1939, año en que se retiró de la casa milanesa, donde había comenzado su carrera deportiva.
Dos días antes, en Silverstone, su piloto José Froilán González, incorporado al equipo un GP antes y en un circuito que desconocía, ya había advertido a las Alfeta, despojándolas también por primera vez de la "pole position". Y como en el arranque de la sesión del día siguiente llovió, casi nadie pudo mejorar sus registros. Así pues, Juan Manuel Fangio y Giuseppe Farina, que encabezaban el campeonato, con 15 y 12 puntos, respectivamente, debieron conformarse con el 2º y 3º cajón en la formación de lanzamiento.

En carrera, todo se restringió a un duelo entre los volantes argentinos, que se definió a favor del arrecifeño, apoyado por un veloz andar y una detención en boxes sensiblemente menor que la del balcarceño. En punta desde la vuelta 12, pero sin poder despegarse nunca de JFG, Fangio paró a cargar combustible al promediar la carrera, demandándole la tarea 50 segundos. En cambio, favorecido por un motor atmosférico que consumía menos que el comprimido de la marca del trébol, el "Toro de las Pampas" -así lo bautizaron los ingleses-, sólo cargó 20 litros de manera preventiva en el tramo final, demorando sólo 30 segundos y saliendo a pista con más de un minuto de ventaja.

Cuando el "Cabezón" paró a repostar, pensó que su "coequipier" Alberto Ascari, que había abandonado en la vuelta 46 por problemas en la caja de cambios y que sumaba nueve puntos en el torneo, iba a tomar su lugar, como ya había ocurrido en el GP anterior -el de Francia-, donde compartieron el 2º puesto. Sin embargo, al ver que González se aprestaba a salir del habitáculo, el italiano le indicó que continuara, otorgándole el honor de ser el primer piloto en llevar a Ferrari a lo más alto del podio. Definitivamente, ese día, la historia visitó Silverstone y JFG dio inicio a la leyenda.

Estas que siguen a continuación son las palabras del propio José Froilán González en las que nos expresa su vivencia de aquella victoria de leyenda:

"Es cierto. La primera victoria de un piloto en F1 tiene un sabor distinto a las demás. Por eso es que el recuerdo de Silverstone '51 permanece intacto en mi memoria. En lo estrictamente personal, porque con sólo 27 años -en aquella época no se debutaba tan joven- y en mi segundo GP en el equipo oficial Ferrari logré doblegar a Juan Manuel Fangio en un gran mano a mano. Y además, porque, para alegría de don Enzo, le gané a Alfa Romeo, marca a la que él había dedicado más de 20 años de su vida y a un auto diseñado en su casa de Maranello. Más aún, fue el primer triunfo del "Cavallino" y de un motor aspirado sobre uno comprimido en una carrera por el Mundial, dando inicio a un nuevo concepto en motores de competición.

Mis primeras vueltas en Silverstone las di junto a Juan, a bordo de un Alfa que la fábrica había puesto a su disposición. Y ahí nomás me dijo: "'Pepe', creo que acá ganan ustedes".
El "Chueco" se la veía venir. Yo no dije nada, porque si bien en Reims habíamos logrado acortar la distancia con respecto a ellos, Gran Bretaña era recién mi segundo GP en la escudería. Pero Fangio tenía razón. El circuito, sin muchas rectas y de 160 de media, nos favorecía. Además, sabíamos que teníamos más de 40 segundos de ventaja, porque las "alfeta", por su mayor consumo, tenían que detenerse en boxes. Y en la cuarta vuelta de la primera tanda voy y hago 1m 44s, tiempo que luego bajé en 6/10. Al terminar la sesión, Fangio me recordó: "¿Viste que te dije que acá las cosas se nos iban a poner feas con las Ferrari?" Recién ahí me animé a decirle a mi compañero Alberto Ascari: "Creo que esta no se nos escapa".

Recuerdo como si fuera hoy el momento en que me bajaron la bandera. ¡Se me cruzaron tantas cosas por la cabeza! Apenas terminé de dar la vuelta de honor llegaron corriendo Nello Ugolini, director del equipo, Meazza, el jefe de mecánicos, "Pinocho" Marimón, Amalia, mi primera señora, y otros argentinos que estaban en el circuito. Minutos después se acercó Juan, que a pesar de no haberme podido ganar estaba muy contento por mí. ¡Qué alegría! Ahí empezó mi "romance" con Silverstone, ganándole nada menos que a las imbatibles "alfeta".

http://www.thef1.com/leyendas/momentosf ... _039.shtml

[Carballedo]

Y esa sólo fue la 1ª victoria

[Showtimethemusic]

Muy triste. Gracias por la info.