Lo que diferencia a un piloto de F1 de cualquier otro deportista es que el primero necesita potenciar más el aspecto neuromuscular (de coordinación y de reacción) que la fuerza de resistencia.
Casi todas las pruebas de Fórmula 1 se llevan a cabo en condiciones de altas temperaturas y en algunas, en condiciones de mucha humedad.
Cualquier piloto tiene que poner a prueba su resistencia a las altas temperaturas y a la fuerte humedad existentes, sin olvidar que también ha estado preparándose duramente a lo largo del año para recuperar la pérdida de energía rápidamente. Esto se debe a que el trabajo físico continuado e intenso durante la pre-temporada es acumulativo, por lo que si no hay contratiempos, el piloto estará totalmente preparado a los “estímulosâ€Â