AÑO 1979
Nelson Piquet con el Brabham Bt46 ventilador en la carrera no puntuable de Donington Park
Sheckter probando carrocerías nuevas, un "telecambio electro-hidraulico", y un motor inclinado tipo Arrows A2 montados sobre un T3 modificado
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Arturo Merzario con su "carro de combate". El aspecto de coche antiguo adaptado casi a mano al efecto suelo es irresistible.
Mclaren M27 con un intento fallido de carrocería integral, alerón trasero enorme, morro liso y posición de los radiaddores muy retrasada. El largo camino hacia los coches-ala...
En invierno, Lotus convirtió el Paul Ricard en una "escuela de pilotaje", subiendo a de Angelis, Lammers, Cheever, South y Mansell a sendos 79, uno de ellos conocido como "laboratorio" (en la foto, sin publicidad en la carrocería: nótense los escapes sobresalientes).
El Kojima, que no tuvo mucho recorrido
Kauhsen; como la mayoría de los imitadores, de aspecto exagerado. No obstante, otro muy notable y bonito intento de coche-ala por parte de un equipo pequeño y privado que, como otros, sucumbió porque crear y desarrollar un coche-ala competitivo requería unos gastos desorbitados.
El desfile de carrocerías del nuevo Alfa Romeo fue una de las atracciones del año. Los que apenas teníamos una o dos revistas disponibles para leer sobre F1 no sabiamos a qué atenernos viendo un coche distinto detrás de otro. Era una gozada esperar la foto cada mes. Si es que venía foto, claro...
Otro coche que no llegó: el Dywa-08
BRM con efecto suelo: otra víctima de la aerodinámica
¡Cuántos coches-ala nos perdimos! Por ejemplo, el Apollon
Las hojas de tiempos de 1979 se hacían con la última tecnología: una tablilla con ranuras para meter cintas con los nombres de los pilotos y los tiempos conseguidos.
Brabham BT48 con alerón trasero experimental
Arie Luyendijk probó el McLaren M26 en Brands Hatch
Las víctimas de los coches ala también se encontraron entre los pilotos: Jacky Ickx no pudo adaptarse a estos coches y dejó la F1...
...al igual que James Hunt, quien no se cansó de decir que "la época de los pilotos ha muerto". Si viese un F1 actual...
Fitipaldi también se fue, no sin antes construir este precioso modelo que tuvo todos los problemas mecánicos imaginables
Niki Lauda probó el BT49 y, sin más, se bajó del coche.
[color=#FF0000]Pero al igual que se iba tanto talento, llegaba un futuro campeón del mundo que, en su 5ª vuelta a los mandos de un McLaren, ya rodaba más rápido que Watson en el Paul Ricard
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Siempre esperaba que Héctor Rebaque consiguiese algún punto y les cerrase la boca a los que, como decía un periódico español -El Pais- :
"Porque el que se tenga el dinero suficiente como para que no importe gastar más de trescientos millones de pesetas al año en caprichos, no debe ser argumento suficiente como para poder correr en una competición que debe estar únicamente reservada a los que han demostrado que poseen las cualidades necesarias como para poder correr. "
¡Pero qué pandilla de bocazas! De ser por esta gente jamás, jamás, jamás habría habido el más mínimo romanticismo en las carreras. Estos periodistas adoradores del "gana o muere" me aburren sin paliativos, incluso hoy.
Lotus 79
HR100
El 79 fue el año de las faldillas laterales. Algunos coches podian quitar los alerones delanteros gracias al efecto-suelo. Piquet era de los que lo tenía muy claro: no necesitaba ni el morro...
En esta temporada fraguó Villeneuve su fama de piloto alocado, ultrarápido, sin miedo y que despreciaba a aquellos que salían a puntuar y no a ganar.
Sin duda, los coches de super-efecto suelo, el Lotus 80 en sus distintas configuraciones, y el Arrows A2, fueron para mi de lo mejorcito de la temporada 79
Lotus 80 al poco de ser presentado
A Reutemann no le convenció en absoluto este coche
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El Arrows A2 de Patrese en Silverstone, uno de los circuitos ultra-rápidos donde los super-efecto suelo debían machacar a la competencia. Aquií, co el alerón trasero original...
... y aquí, con uno convencional adaptado.
En 1979 se celebraron nada menos que tres carreras no puntuables
Donington
Brands Hatch
Imola
Pero sobre todo, la temporada de 1979 nos dejó esto: multiplicidad de formas en los coches. Algo impagable para un aficcionado.[/color]
Long Beach
Interlagos
Holanda
Argentina
Bélgica
Francia