"En este mundo traidor, nada es verdad ni es mentira.
Todo es según el color del cristal con que se mira"
Ramón de Campoamor; Poeta y diputado del siglo XIX pronunció esta conocida y más que acertada frase que no creo que necesite de explicación alguna.
Pocas cosas hay que sean absolutas y, por ende, casi todas pertenecen al mundo de la relatividad.
¿Fué el pasado año EL Ferrari un buen o un mal coche?
¿Quizás fuera regular?
Ni una cosa ni la otra sino todo lo contrario.
Podríamos estar horas y horas debatiendo y nadie tendría toda la razón y estaría totalmente equivocado.
Hay que partir de la base de que, supongo, quienes apoyan la teoría de que Ferrari no fué un buen coche por que parten de la base de que Ferrari ha de ser el mejor o, como poco, compartir liderato con otros coches, pero nunca por detrás. Este es el mundo visto a través del cristal rojo: Un Ferrari siempre ha de estar optando por ganar. Que luego las circunstancias de la carrera (suerte, fallos, errores etc etc) no lo permitan es harina de otro costal.
Para otros, el hecho de que en determinadas fases del campeonato, un bólido rojo haya liderado con diferencia la clasificación llegando a ganar incluso tres carreras (creo) una de ellas la segunda y habiendo peleado por la victoria final hasta el último GP con serias opciones, deja bien a las claras que los rojos no solo no fueron un coche del montón sino que, entre unas cosas y otras, estuvo al nivel de los mejores.
¿Quién está equivocado?. ¿Quién tiene razón?. Todos y ninguno.
Sería tedioso ponerse ahora a analizar todos y cada uno de los datos de que podríamos disponer acerca del pasado mundial de F1 para dilucidar, no quién tiene razón y quién no, sino para poder tener una visión de conjunto, que nos permitiera tener una idea de quién está más cerca o más lejos de una realidad...como poco nada clara.
Tantas cosas influyen a la hora de plasmar la clasificación final no ya en una temporada completa sino, muchas veces en un sólo GP.
Es verdad que Alonso y su Ferrari ganaron en la segunda cita del calendario de 2012. Pero no es menos verdad que su victoria tuvo un fuerte componente se suerte. Pero, claro, otros dirán: "Ya, pero había que estar ahí y aprovechar la circunstancia con un buen coche" Y es verdad.
En ciertos momentos y bajo ciertas circunstancias, El Ferrari se mostró muy fuerte así como en otros momentos se le vió claramente lejos de "la pomada".
En fin, que si uno esgrime argumentos a favor de la competitividad del Ferrari, otro puede esgrimir, por ejemplo los resultados de las sesiones de clasificació de los GP's que no fueron como para optar a nada o casi nada (para ser Ferrari, claro)
Y así nos podríamos pasar otra pretemporada más sin llegar a ponernos de acuerdo...

¡¡¡Qué bonita es la F1!!!
Y para terminar de un modo gráfico terminaré como empecé:
"En este mundo traidor, nada es verdad ni es mentira.
Todo es según el color del cristal con que se mira"
¿No os lo creeis? pues mirad cómo ven el "Mundo" por ..."Ahí abajo"
