Si no hay un informe técnico del delegado de la FIA, los comisarios no pueden entrar a juzgar", afirma Verdegay · Varias decisiones apuntan a que se ayuda a Brawn GP
La polémica sobre si Brawn ganó el pasado Gran Premio de Australia con un escape ilegal no tendrá rearbitraje. Entonces pasaron las verificaciones técnicas de la FIA y ningún equipo reclamó, con lo que perdieron su oportunidad. En Malasia, los dos monoplazas blancos ya lucieron una pieza rediseñada, cubierta en su totalidad con fibra de carbono, por si acaso a alguien se le ocurría la posibilidad de la protesta.
"Si no hay un informe por parte del delegado técnico de la FIA, Jo Bauer, los comisarios no pueden entrar a juzgar, pues suelen ser profanos en temas técnicos. Eso sólo ocurrió una vez en la historia, en los 90 contra McLaren", aclara Joaquín Verdegay, comisario español de la FIA.
Los equipos están más pendientes de la vista del próximo día 14 en la Plaza de la Concordia de París, cuando se reunirá el Tribunal de Apelación para decidir sobre los difusores de la discordia. Por cierto, que Ross Brawn dice que le ofreció esta pieza a todos los equipos en mayo de 2008 y que poco menos que le mandaron a freír espárragos, enfrascados como estaban en aquel Mundial.
"No comment"
El tema del escape se da por pasado por los equipos, algunos de los cuales estaban fisgando si había posibilidad de meterle mano a Brawn por ese resquicio. Flavio Briatore contestó: "Mierda. No sé nada de este tema, no quiero comentar nada". No se sabe si porque han perdido la ocasión o porque al escuchar la palabra Brawn se pone hecho una fiera. En Ferrari contestaron con un "no nos consta".
Escape o no, está claro que hay una voluntad inequívoca de la FIA por potenciar a esta nueva escuadra, surgida de las cenizas de Honda y estandarte de la nueva filosofía low cost que quiere imponerse. Se trata de tener a los equipos divididos y enfrentados con la intención de demostrarles que necesitan un faro guía, como son ellos y Bernie Ecclestone.
No se explica de otra forma que en Australia esperaran más de dos minutos para sacar el primer coche de seguridad a la pista tras el accidente de Nakajima. Resulta que Button iba a realizar su primer repostaje y el safety podía arruinarle la carrera. Tras salir Button de boxes entró el Mercedes SL de Bernd Maylander para neutralizar la prueba. Es curioso que en la segunda ocasión, la del accidente de Vettel y Kubica, sólo tardaran 17 segundos. La victoria ya estaba decidida.
http://www.marca.com/2009/04/06/motor/f ... 14021.html