El pasado domingo hubo más personas en Singapur viendo ganar a Fernando Alonso por televisión que televidentes durante la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos chinos. Eso aseguran los datos reportados desde Singapur: casi 790.000 espectadores siguieron la primera carrera nocturna en la historia de la Fórmula 1 frente a los 765.000 de los Juegos Olímpicos, el pasado mes.
Pero no es unánime el éxito en cuanto a organización: algunos equipos están encantados, emocionados y agradecidos por cómo se desarrolló la carrera del fin de semana... mientras que otros no lo ven tan claro (y no sólo por la oscuridad de la noche). Del lado positivo encontramos a Martin Whitmarsh, de McLaren: "El ambiente, el telón de fondo y las instalaciones simplemente fueron fantásticas". O Martin no estuvo en la misma carrera que Montezemolo o ambos personajes tienen un punto de vista muy diferente, pues el Presidente de Ferrari declaró tras la carrera singapurense: "Todo esto es humillante para la Fórmula 1; es algo de lo que quiero hablar con los demás equipos en las próximas semanas".
Montezemolo también es el Presidente de la recién creada asociación de equipos de Fórmula 1, FOTA, y cree que el pasado fin de semana fue un "circo" en el que sólo la lotería del coche de seguridad supuso un aliciente. Luca Cordero afirmó antes de la carrera estar "harto de los circuitos urbanos" que no representan ninguna oportunidad para adelantar.
Por otra parte, Montezemolo confirmó el papel de Räikkönen para lo que queda del mundial: ayudar a Massa: "Espero que Räikkönen muestre que es campeón del mundo en las carreras restantes para ayudar a Massa, para correr por el bien del equipo y para terminar por delante de McLaren".
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