El “Al Nasr Sport Club Dubai Gran Prix” fue un proyecto que nació a fines de 1980 y programado para diciembre de 1981, de forma tal que coincidiera con los festejos por el décimo aniversario de los Emiratos Árabes Unidos (EAU).
Los organizadores visitaron Dubai por primera vez en enero de 1981, momento en el cual se dieron cuenta que llevar este evento adelante suponía un gran esfuerzo:
• No existía en Dubai circuito de carreras alguno, de hecho ni siquiera autos de carrera.
• La red de carreteras públicas resultaba, en ese entonces, insuficiente para montar un circuito callejero en ellas.
• Menos aún había marshalls capacitados en el país y gente con experiencia relacionada al mundo motor.
A pesar de estos inconvenientes el razonamiento de los organizadores resultaba lógico. ¿Por qué no iba a ser posible realizar carreras automovilísticas en este Emirato de “gustos occidentales”? ¿Por qué si por cultura les fascinaban las carreras de camellos no les gustarían las de autos que eran mucho más rápidos? Y por sobre todo, Dubai tenía el dinero para llevar adelante el inicio del automovilismo deportivo en la región. Las cabezas visibles de la organización, por el lado británico, fueron Stan Robinson y Martin Hone, siendo este último a quien le cupo la tarea de convencer a los jeques de las ventajas que les brindaría organizar carreras en Dubai. El jeque Mana, Ministro de Deportes de Dubai, no fue difícil de convencer ya que era un enamorado de los automóviles… bueno, como la mayoría de los jeques.
El lugar elegido para construir el circuito fue a las orillas del Golfo Arábico, alrededor del Hotel Hyatt Regency y lógicamente también rodeado por el desierto. Las obras comenzaron en junio de 1981 momento hasta el cual para cualquier persona ajena a la organización nada hacía suponer que allí se harían presentes bólidos girando a toda velocidad ya que la arena de la costa aún permanecía inmaculada y abrasada por el sol que brilla en Dubai los 365 días del año. El trazado cubría una distancia de 2,625 km y constaba de varias rectas seguidas por curvas en su mayoría de ángulos rectos, un dibujo sencillo sin atractivo en particular más que el que pudiera brindar el lujo de Dubai y su fabulosa costa.
Incluso antes que el circuito estuviera finalizado, comenzó a publicitarse el Gran Premio de Dubai como la carrera más lujosa del mundo motor de la época. Cargolux, hoy en día la principal aerolínea de transporte de carga europea, sería una de las principales auspiciantes de la carrera exhibición y publicitaba la misma con un montaje que mostraba el aspecto del futuro circuito alrededor del Hyatt y un inmaculado B747 sobrevolando los mismos. El diseño del circuito estuvo a cargo de personal británico, con experiencia en este tipo de construcción, y la mano de obra corrió por parte de personal indio y paquistaní. Los costos, de los que nadie hablaba, corrían a cuenta del Municipio de Dubai City que por aquel entonces constaba de unos 25.000 habitantes nacionales y 225.000 extranjeros aproximadamente.
Promoción del GP de Dubai realizada por Cargolux
Las instalaciones fueron construidas pensando a futuro con la idea de albergar algún día un Gran Premio de la F1 válido por el Campeonato del Mundo, por lo cual se puso especial cuidado en cumplir con las exigencias de la FISA por aquella época en lo respectivo a circuitos. Sin embargo estaba claro que el debut de la pista con una prueba oficial costaría cifras mucho más significativas por lo que resultaba más viable empezar por “alquilar” el Circo de la F1 en calidad de exhibición acompañada por otros espectáculos. Los ingleses invirtieron un millón de libras esterlinas en la organización y dado que estaba fuera de sus alcances convocar a estrellas contemporáneas decidieron contratar a todo aquel que en algún momento, más o menos lejano, haya gozado de fama y gloria en el automovilismo. Si todo resultaba según lo planeado convencerían del todo a los jeques para que estos aportaran la cuantiosa suma que se requería para organizar un GP en dos o tres años. Incluso estaba la posibilidad de que Sudáfrica perdiera su plaza por su política de Apartheid y se llegó a especular con esto para que Dubai ocupara su plaza.
Esquema del trazado original del Autódromo de Dubai
Por parte de las autoridades de Dubai, su interés lógicamente no solo se resumía en introducir el automovilismo deportivo en sus tierras. Por el contrario, todos los autos que tomarían parte del espectáculo llegarían por barco y avión, por lo tanto era una gran oportunidad para esta pujante región de mostrar al resto del mundo su aeropuerto y nuevos puertos. El valor de la totalidad de los autos transportados se estimaba en unos 3 millones de libras de la época, y como cantidad de autos había cantidad de contenedores. Estos serían aprovechados: el paddock del circuito, que no llegó a concluirse por demoras en las obras, fue montado con dichos contenedores.
Vista aérea en la que se aprecian los boxes "fabricados" provisoriamente con contenedores
El espectáculo constó de tres jornadas diarias, entre el 2 y 4 de diciembre de 1981 y el marco de público fue importante, calculado en unos 20.000 espectadores. Los dos primeros días consistirían en pruebas y reconocimiento del circuito mientras que en la última jornada se desarrollarían distintas carreras con diversos tipos de autos así como la presentación de los F1. Con un acto conmemorativo inicial, seguido por un desfile de buggies organizado por el Al Nasr Motor Club, un desfile militar, bandas de la policía y otros atractivos se dio inicio al “Grand Prix de Dubai”. El ex astronauta Ronnie Walter Cunningham, quien fuera integrante de la tripulación del programa Apollo 7 en 1968, fue invitado en calidad de conductor del Pace Car por los organizadores.
El fin de semana arrancó con una carrera de celebridades del automovilismo a bordo de autos Citroen CX. Entre los participantes se contaban grandes glorias de la F1 como Stirling Moss, Jack Brabham, Innes Ireland, Phil Hill, Dan Gurney, Denny Hulme, John Surtees y Helmut Marko. También hubo pilotos que habían hecho historia en Le Mans como Carroll Shelby, Roy Salvadori, Richard Attwood y Derek Bell. La lista de participantes la completaba el británico John Fitzpatrick, de gran trayectoria en Sport Prototipos con Porsche, y por pilotos de F1 activos en la época como Patrick Tambay, Keke Rosberg, Nigel Mansell, Brian Henton, John Watson, Bruno Giacomelli y David Kennedy.
La clasificación para esta competencia tuvo en la pole a John Watson. Quien lo acompañaría en la primera fila sería ni más ni menos que Dan Gurney, demostrando que no estaba para nada “oxidado”. La dupla que logró la segunda fila de largada estuvo compuesta por Marc Surer y Bruno Giacomelli. La carrera fue fijada a 10 giros al trazado, resultó de trámite entretenido, con algunos cuantos roces incluidos, y vio como ganador al italiano Giacomelli. El podio lo completaron Marc Surer y David Kennedy marcando este último la vuelta rápida con un registro de 1’34,74” a un promedio de 99,74 km/h. El más rápido los ex-F1 fue Innes Ireland quien arribó en cuarta posición seguido por Watson, Fitzpatrick, Gurney, Bell y Attwood.
John Watson a bordo de su CX con el que marcó la pole y finalmente arribó 5º. Instante previo a la largada.
A continuación de la presentación de los Citroen CX fue el turno de la denominada “Pace Petroleum Aston Martin Trophy”, en la cual lógicamente hubo participación de autos de la casa británica de distintas épocas. La carrera se inició con Roy Salvadori escapándose en punta a bordo de su DBR1 seguido de cerca por Mike Salmon y su hermoso Project 212 con el cual a posteriori le daría caza, ganando la prueba a un promedio de 104,09 km/h y marcando el giro más veloz al clavar el cronómetro en 1’27,70’’.
Salvadori seguido por Salmon, este último a la postre el vencedor con su Project 212
Luego de la emocionante lucha que se vio en la punta del Aston Martin Trophy tuvo lugar una carrera de autos de producción pudiéndose ver en pista autos como Ford Capris, Dolomite Triumph, Mazda RX7 y otros. Fue precisamente a bordo de un Mazda con el cual Tom Walkinshaw tomó el liderazgo iniciada la prueba seguido por el Ford Capri de Vince Woodman. Al llegar a la complicada primera curva el belga Jean-Michel Martin, quien venía por la línea interior, se encontró con la curva de golpe mientras el resto ya comenzaba a doblar. Sin lugar para él en el asfalto decidió cortar la curva pero al volver a pista su Ford Capri arrastró consigo a otros dos Ford, el de Charles Sawyer-Soare y su propio compañero de equipo Gordon Spice. La carrera se desarrollo sin sobresaltos para Walkinshaw, quien no abandonó la punta hasta la bandera a cuadros, venciendo a un promedio de 117,05 km/h y también quedándose con la vuelta rápida al marcar 1’20,74’’. El podio lo completaron Vince Woodman y Graham Goode.
Breve video de la largada correspondiente a los autos de turismo
Instantánea del choque inicial y sobre el costado derecho el Mazda del vencedor Tom Walkinshaw
Luego vino una pausa en las carreras pero el espectáculo continuaba para el público en las gradas con una demostración a cargo de Juan Manuel Fangio y uno de los Mercedes Benz W196, Stirling Moss en una Maserati 250F, Roy Salvadori a bordo de un Aston Martin DBR4 así como también se pudieron observar el andar de un Connaught A, una Bugatti Type 35B y un Talbot Lago a los mandos de John Harper, Ian Preston y Richard Pilkington respectivamente. Durante su presentación Fangio no se sentía bien físicamente, por entonces ya contaba con 70 años (que no eran solo los años sino que venían acompañados por algunos antecedentes cardiacos) sumados al cansancio de un largo viaje en avión hasta Dubai, del cual no tuvo descanso reparador alguno antes de subirse al W196. Hizo un trompo con el auto, del cual por suerte no hubo daños para el queridísimo “Chueco” ni para el auto. Sin embargo lo que en principio supuso un simple trompo luego, ya habiendo retornado a los improvisados boxes, derivó en un principio de ataque al corazón que lo tuvo en un hospital de Dubai por un par de días, siendo dado de alta el 6 de diciembre.
El “Gran Prix de Dubai” continuó con la salida a pista de probablemente los autos más lindos del fin de semana. Fue una carrera fijada a 10 giros al trazado denominada la Marlboro Cup Sportcars. La misma vio vencedor a Gerry Marshall y su Lola T70 MKIIIB relegando al segundo lugar a John Brindley y su McLaren N1B en gran batalla por el liderazgo. El podio lo completó Richard Attwood con un Ferrari 272LM. El cuarto puesto fue duramente disputado por los hermanos Knight; finalmente sería para Mike a bordo de su Lola T70 MKIIIB dejando en quinta posición a Richard en su McLaren M1C. La sexta ubicación fue para Richard Thwaites en un Chevron B6.
La lucha entre los hermanos Knight, Mike en primer plano con el Lola ocultando parcialmente al McLaren de Richard
Otros que dieron batalla, aunque no en los puestos de vanguardia, fueron David Piper a bordo de una bellísima Ferrari P4 y Nick Mason conduciendo una no menos agraciada Ferrari 512. La carrera resultó ser la más rápida del día y despertó un gran entusiasmo entre el público presente. La vuelta más rápida correspondió a John Brindley con un tiempo de 1’14,06’’ y un promedio de 117,05 km/h.
David Piper a bordo de la P4 por delante de Nick Mason y su 512
Luego fue el turno del “plato fuerte”, si puede decirse así de una demostración de los autos de F1. Esta presentación, que no consistía en una carrera en sí, sino en quien lograba realizar el giro más veloz teniendo como regla básica una única vuelta posible por piloto, tenía un ingrediente entre estos ya que los directivos del Hotel Hyatt ofrecían un premio de $5.000 para quien marcara el giro más veloz. El primero en salir a pista fue Patrick Tambay a bordo de un Theodore TY01 pero en dicho giro el francés se pasó ligeramente una curva por lo que tuvo que decirle adiós al premio que la gente del Hotel Hyatt entregó a John Watson, quien a los mandos de un McLaren MP4/1 clavó los relojes en 1’04,4’’ a una velocidad promedio de 149,35 km/h!! Esta vuelta rápida suponía el registro que quedaría como record del circuito. Sin embargo, al no estar presente un “jurado” calificado la FISA dispuso que los tiempos marcados durante todo el fin de semana no serían validados como oficiales.
Patrick Tambay a bordo del Theodore TY01 en su vuelta lanzada. El Hyatt de fondo haciendo de marco
John Watson a bordo del MP4/1 en Dubai. Su vuelta rápida le permitió hacerse el acreedor de los $5.000 de premio
El evento en Dubai concluyó con una nueva salida a pista del Mercedes W196, y dado que Fangio se encontraba en el hospital, el mismo le fue cedido a Phil Hill quien también realizó un trompo en su presentación aunque tampoco hubo daños que lamentar para Hill ni la máquina. También se hicieron presentes en calidad de demostración, para cerrar el espectáculo, Derek Bell a bordo de un Aston Martin Nimrod y Denny Hulme con un McLaren M8D de la serie Can-Am.
Phil Hill a bordo del W196 en reemplazo de Juan Manuel Fangio
Derek Bell girando con el Aston Martin Nimrod, primera vez en pista para este auto
La organización de este “Gran Prix” fue una fantástica oportunidad de mancomunión entre el ambiente del automovilismo deportivo y la cultura de Oriente Medio, de hecho constituyó la primera presentación de autos de competición en el Cercano Oriente. El jeque Hamdan bin Rashid Al Maktoum, así como mucha gente de Dubai, esperaba que el evento se repitiera año tras año, cosa que a posteriori nunca se concretó. Sin embargo el entusiasmo en Dubai había nacido con tamaño espectáculo, y si bien pasaron bastantes años, el circuito fue luego remodelado y rediseñado con la ayuda y sugerencias de varios pilotos experimentados.
Las obras de remodelación finalizaron pasado mediados del 2004 y fue inaugurado en octubre de ese año con la presentación de la Fórmula Renault V6. El complejo cuenta actualmente con un circuito “largo” de 5,390 km pero dispone de cinco variantes más aprobadas por la FIA. Entre las temporadas 2004 a 2006 se realizaron pruebas de la FIA GT y a fines del 2005 se hizo presente la A1 Grand Prix, pasando también por allí GP2 Asia Series y la SpeedCar Series.
Esquemas de las 6 variantes actuales del Autódromo de Dubai
Lamentablemente para Dubai el año pasado en el vecino Abu Dhabi debutó la F1 y tiene un contrato a largo plazo, por lo que resulta muy difícil que se dispute un Gran Premio en Dubai existiendo actualmente otro en tierras tan próximas y dentro de los Emiratos Árabes Unidos… pero quien sabe, los “petrodólares” todo lo pueden y mal que les (nos) pese parecen ser la debilidad actual de Bernie y la FIA.
Saludos, Ale.
