Ostras, a mí es que lo que me alucina es que dediquemos más páginas a hablar del puñetero dedo de Vettel que de asuntos deportivos de la carrera, ya sean estrategias, adelantamientos y demás, o incluso de las posibles sanciones a Vettel, o de cómo va el mundial. Yo es que ayer vi a Vettel levantar el dedito y no me provocó ni rabia ni da por el estilo por el dedito, me jodió que ganara, porque se mete en la pomada el que para mí es el rival más peligroso de Alonso en lo que queda de campeonato, ¿pero el dedo? Yo lo único que no aguanto, y es un problema mío que en ningún caso motivaría descalificaciones al piloto, son las celebraciones payasas, como la grulla de Alonso en los años Renault o los shows de Usain Bolt, o las prepotentes y preparadas celebraciones al estilo Lorenzo o Rossi más atrás (¿tan seguros están de su triunfo que dedican tiempo a ensayar celebraciones y escenificaciones?), cosas que no se me figuran espontáneas sino largamente pensadas, como esos discursos en los Oscar de gente que ya se sabe premiada. Así que oigan, porque Vettel gane la carrera y saque el dedo, pues está describiendo lo que es en ese momento, el número uno. Las banderas, los saltos de alegría de Webber, las emotivas lágrimas de Alonso en Valencia o las divertidas orquestas de Schumi, bienvenidas sean. Y sí, el recuerdo a Sid Watkins bravo por Vettel, y ahora que nadie venga a que si lo dijo por quedar bien, es que aunque hubiera sido por quedar bien me parece estupendo, es un gesto bien noble.
Sobre cosas puramente deportivas, a mí lo que me alucina es el tema Webber, y no quiero que se me malinterprete con lo que diré. Webber ha ganado tantas carreras como Vettel en 2012, aunque es bien cierto que sus trayectorias han estado bien diferentes en cuanto a regularidad. Yo creo firmemente que en un equipo de F1 los coches que ambos pilotos tienen son los mismos a nivel de potencial. Pero lo que no entiendo es el papel que en Red Bull dan a Webber a nivel psicológico, a nivel de pieza en el engranaje del mundial. El tío gana en Silverstone, se pone segundo del mundial pero en ningún momento tienes la sensación que él sea la prioridad en Red Bull, es casi como si hubiera un fantasma en ese otro coche, sólo hay que mirar las estrategias, ahí es donde uno ve claramente la desidia que creo que se aplica sobre Webber. En Hockenheim o Hungría, por ejemplo, el aussie califica mal pero durante la carrera no ves una estrategia arriesgada para intentar que recupere, es como si el segundo Red Bull no existiera para Horner y compañía, y ya no digamos en Spa, donde Webber salía por delante del alemán pero mientras que a este último el equipo le montó una estrategia para remontar, al aussie lo tuvieron como si no corriera. No digo que estén fastidiando a Webber a drede, digo que parece como si en Red Bull les sobrara ese segundo coche, y es algo que no entiendo muy bien. En Singapur más de lo mismo, sale séptimo y acaba undécimo tras una aberrante estrategia de montar superblandos en mitad de la carrera En cambio, ves a Ferrari con Massa y, por mucho que se diga, no tiene nada que ver. Sea el F2012 o el brasileño los que no rindan a los niveles de Alonso, casi siempre puedes ver que por muy atrás que salga Massa, desde el muro siempre intentan mejorar su posición mediante estrategia y riesgos, como se pudo comprobar en Singapur cuando empezó la carrera en el pozo y pasando por boxes y acabó octavo, poca broma. O en Monza mismo, con el trabajo en equipo en la Q3 cuando ya se vio que Alonso no tiraba.