Quizás sea por que yo tengo unos esquemas mentales más marcados que algunos otros, pero mi forma de ver las cosas me dice lo siguiente:
Mientras en esta competición haya dos coches por equipo, a aquellos que nosotros hemos venido en llamar eso"equipo", no es otra cosa que una escudería. Una escudería que, como tal, tiene unos intereses.
Estos intereses no son otros que los de colocar a todos sus elementos en competición lo más alto de la tabla posible. A los dos, pues esta y no otra es la mejor manera de obtener los resultados que ella busca.
Dichos resultados, al final de la competición, se transforman en puntos que, aparte de auparle a la consecución de título de constructores con su consiguiente cota de gloria y buena publicidad, le proporciona una ingente cantidad de pasta (a más puntos más dinero) que le servirá para financiar los enormes gastos que suponen el permanecer un año más en este circo con opciones a seguir obteniendo éxitos en años venideros.
Ya sé que todo esto os lo sabeis de memoria, pero sólo quería que no se nos fuese de foco esta premisa.
Una escudería tiene como meta principal obtener el mayor número de puntos y, en principio, le da lo mismo quién los consiga aunque, claro está, sabe perfectamente que, generalmente, uno de los dos
pilotos a sus órdenes, por cualidades propias, está mejor dotado para obtener mayor número de puntos y es consciente de que en caso de posiciones inmediatas una de otra en el transcurso de una carrera, sólo por razones estadísticas, sabe que siempre será mejor proporcionar a su primer piloto la posición preferente. Resulta obvio que si va a recaudar los mismos puntos, prefiera que el piloto con más posibilidades de alcanzar el título individual sea el elegido para ocupar la plaza preferente. Y aunque para el equipo el título individual ocupe un segundo plano con respecto al del título colectivo, sabe que eso también le da prestigio. Sin embargo con un piloto, la cosa cambia:
De nada le sirve a un piloto que una escudería alcance el título si el no hace lo propio con el individual.
Hechas estas afirmaciones de cajón trataré de exponer mi punto de vista particular sobre el asunto.
Ya he dicho en otro post que no creo que a nadie aficionado a este espectáculo le hagan gracia no sólo las órdenes de equipo sino la clasificación 1º y 2º entre pilotos de la misma escudería.
Pero, salvo en casos puntuales en la historia de la F1, siempre ha sido así y por mucho que nos pueda fastidiar, los equipos lo tienen bastante claro:
Fulano es mi primer piloto y Mengano el segundo y quiero que
entre ambos obtengan para
mi equipo el mayor múmero de puntos.
No me hace jodida la gracia que en un momento determinado, mis dos pilotos se enzarcen en una lucha fraticida (aunque de hermanos nada) que puede llevar a que uno o los dos coches queden fuera de combate.
Está bien claro que voy a hacer todo lo que esté en mi mano para evitar luchas intestinas que puedan perjudicar al equipo por mucho que puedan beneficiar los intereses individuales de uno de
mis pilotosEstá clara mi intención a la hora de resaltar en
negrita ciertos conceptos que para mí son importantes.
Evidentemente, todos los pilotos, antes que engranajes de una máquina como una escudería, son individuos y prima sobre ellos el egoísmo propio de un ganador. Dicho sea lo de egoísmo en el mejor de los sentidos.
Todos los pilotos llevan en su ADN los genes de un ganador y cuando menos te lo esperas (siempre o casi siempre) aparece el depredador que llevan dentro y que les empuja a adelantar a todo lo que se les plante por delante (Safety Car incluido
).
Es labor y obligación del dueño de la escudería el gestionar esta natural agresividad propia de ganadores para que trabajen en beneficio del equipo.
Y aquí es donde aparece la necesidad de establecer una serie de normas de disciplina interna que los pilotos, no se nos olvide, firman y acetpan cuando se incorporan al seno de un equipo.
Estoy seguro de que todos querrían no firmarlas, pero es lo que hay. Y si algún piloto no está dispuesto a acatarlas, lo que debería de hacer es decir antes de firmar el contrato:
- "¡Eh!. A mí borradme este artículo de mi contrato por que no lo acepto".
Seguramente, hoy por hoy, ninguna escudería "pasaría por el aro".
Según lo veo yo, en todos los equipos hay normas establecidas, y estas normas, llevadas al plano de una carrera, se convierten automáticamente en órdenes de equipo. Órdenes preestablecidas y que se cumplen a toque de corneta (con una señal establecida y distinguible en caso de que este prohibido su uso directo), o con un comando claro para todo el mundo (en caso de que no esté prohibido su uso).
Resumiendo:
Las órdenes de equipo están y estarán ahí, ocultas, a la luz del día o en penumbra y nos quitarán como nos han quitado otras veces espectáculos como el vivido en el pasado GP de Malasya.
Es un tema que no tiene solución mientras haya en pista dos o más coches que compiten para un mismo dueño.
¿Solución para que dejen de existir las órdenes de equipo?. Que deje de haber equipos.
¿Un ejemplo?: Un sólo coche por escudería.
¿Opinión personal sobre aquellos que no acatan las órdenes de equipo?: Mala, muy mala. Y mucho peor aún si este desacato supone traicionar aprovecharse de un componente del equipo que si ha respetado y cumplido dicha orden.
Yo no sé Webber, pero si volviese a darse la misma situación, sin una sanción equivalente tanto para el transgresor como para el perjudicado, Vettel no pasaría de ninguna de las maneras.
Pero, como ha dicho un ex jefe de equipo y manager de infausto recuerdo:
"No hay huevos"PD. POr cierto...
Yo también creo que si no todos, muchos pilotos son unos malcriados.