"HASTA LOS ANDARES"
Hasta los andares.
¿Cuántas veces no habremos escuchado esta "coletilla" cuando, hablando de las bondades de la estrella española del ganado porcino, la denominada "Ibérica" y de la que se desconoce hasta qué edad es capaz de vivir pues antes que eso les llega su "San Martín", los entusiastas (que somos muchos) expresamos hasta qué punto nos gusta todo lo relacionado con ellos?
Resuelvo el galimatías diciendo ...eso: "A mí, del cerdo, me gustan hasta los andares".
Hemos sido capaces de sacar provecho de este magnífico animal hasta puntos insospechados y aún a pesar de que no son todos los que llegan a disfrutar de todo lo que nos puede ofrecer, si son muchos los que han sabido apreciarlo en su totalidad.
Hasta los andares....
Y por llegar a disfrutar de todo, los hay que disfrutan no sólo con sus manjares gastronómicos. Los hay que disfrutan incluso (eso reconozco que no lo comparto) durante la matanza.
Pero aún no siendo capaz de compartirlo, no me duelen prendas en entenderlo y comprenderlo.
Con la F1 pasa algo parecido.
Hay quien se contenta con ver los coches pasar como centellas por delante de ellos, sin más y hay quien disfruta absolutamente de todo lo relacionado con la categoría y que no está dispuesto a prescindir de nada de lo que la F1 es capaz de ofrecerle.
Una de esas "cosas irrenunciables" para mi y para muchos otros, es el tema decibélico.
Y dentro del apartado sonoro, los hay aún más "frikis" que no solo hacen distingos entre el nivel de decibelios sino que hasta llegan a distinguir entre el sonido de unos motores y otros.
No voy a negar que hay aspectos que a priori parecen más importantes que otros y que, ante todo, lo que más importa es el aspecto visual y no hay nada que pueda sustituir al hecho de ver los coches en carrera.
Pero todos los demás aspectos suman y suman unos más que otros dependiendo de quién sea el que hace las cuentas.
A modo de ejemplo os dejo los links de unos videos en los que se ven y se oyen motores V6, V8 y V12 montados en un mismo modelo (al que cada vez estoy más picado para comprar en un futuro no muy lejano).
Tengo, como buen aficionado al apartado sonoro, un favorito. Pero lo que si os aseguro es que nunca compraría uno con un motor eléctrico.
A ver con cuál os quedaríais vosotros