¡Quinto!
Esa fué la apuesta que hice con la parienta (aficionada también, aunque por ciencia infusa, a la F1).
Alonso quedará, como viene siendo habitual en los últimos tiempos, quinto en la clasificación.
Y...en fin...Ya sabemos todos lo que pasó.
La verdad es que no era una apuesta demasiado arriesgada dadas las impresiones que, tanto en los entrenamientos como en las prácticas, nos habían proporcionado los Caballinos renqueantes.
De nuevo y ya van...la temporada comienza con esa ya más que familiar sensación (que es más que una sensación) de que, si se quiere hacer algo este año, habrá que remontar. Salvo que, claro está, ese algo no sea otra cosa que el ridículo.
Por que...vamos a ver...Uno puede tener un mal año y diseñar un truño infumable al que poca cosa se le puede sacar en limpio durante una temporada. Esto le puede pasar al más listo de la clase. Pero de ahí a que el año se convierta en un lustro...
Pero bueno, aquí el que no se consuela es por que no quiere por que sólo bastaría que nos fijásemos en los Red Bull y a los menos exigentes (al menos) les saldría esa risa floja que le sale a los perdedores cuando sus más odiados enemigos la cagan aún más que ellos.
- "¡Buah! Nosotros ya estamos acostumbrados a ser segundones o tercerones, de modo que estar donde estamos ya forma parte de nuestra idiosincrasia. Pero lo de los vendedores de refrescos..."
Y en cierto modo no les faltaría razón, por que este primer GP ha sido, cuanto menos, desconcertante en la casa de los toritos rojos.
Ayer, cuando le eche un vistazo al foro y me enteré de que al Ricciardo lo habían descalificado por exceder el flujo de combustible, después de haber dado una vuelta más de calentamiento y las...¿8? tras el Safety Car, me quedé que no me lo creía.
¡La madre que lo parió! Pues ya está delicado el tema si, dadas las circunstancias, ha pasado esto...
De todas formas...¿Qué quereis que os diga?
Ya puede ser un tema reflejado en la reglamentación de este año, pero el mero hecho de que en una carrera de bólidos (y más de F1) en la que lo que se supone que debe de primar es la exuberancia de los coches que compiten, la velocidad, la potencia, el desenfreno y el despiporre, resulta que los "aguerridos pilotos" cada vez más se van pareciendo a taxistas que van haciendo encaje de bolillos para gastar la cantidad mínima de combustible en cada carrera (y nunca mejor dicho lo de "carrera").
Yo...La verdad...Si hace sólo unos pocos años me dice alguien que iban a descalificar a un F1 por consumir mucho combustible, es que me uno a los miembros del equipo Ferrari en lo de la risa floja.
- "¡¡Amos!! ¡¡No me jodas!!. Pero... ¿Cómo van a hacer algo así?"
- "¿Eliminar a un F1 por gastar mucha gasolina?"
- "¿Y qué va a ser lo próximo? Sancionarlos por exceso de velocidad?.
Yo es que lo flipo. Os juro que lo flipo.
¿En qué cojones se ha convertido este deporte (o lo que sea)?.
Que si no puedes gastar más gasolina
Que si no puedes gastar más neumáticos (y encima, los que yo te diga).
Que si no puedes gastar más que cinco motores.
Que si, encima, los motores han de ser V6
Que si no puedes pasarte de estas R.P.M....
Que si ahora te tienes que inventar un artilugio infernal, estrafalario y absurdo en colaboración con el "conejito de Duracell"...
Lo dicho: ¡¡Amos!! ¡¡No me jodas!!.
Esta F1, de F1, perdonad que os diga, no tiene nada de nada.
Es una mierda de competición que, poco a poco, se ha ido viendo despojada de gran parte de los alicientes culpables en su día de que (creo) muchos de nosotros nos envenenáramos con su inmenso despliegue de...¿Glamour?.
¡¡¡Yo qué se!!!.
Sólo puedo decir que esta...no es mi F1, que me la han cambiado y que, no es que ya no me guste, pero me gusta menos; mucho menos.