Mercedes cree que su motor puede llegar a alcanzar los 1630 caballos
Cowell cree que necesitan "trabajo, innovación y tiempo" para cumplir con el objetivo
Los motores de los años 80 rondaban la cifra de los 1300CV en su máximo rendimiento
MIGUEL CARRICAS
3 FEB 2015
Las primeras impresiones de los test de Jerez sitúan a la unidad de potencia de Mercedes como la referencia competitiva de la parrilla de cara a la nueva temporada. Superado el ecuador de la tercera jornada de entrenamientos, el W06 Hybrid suma un total de 93 vueltas, casi 40 por encima de Carlos Sainz, su máximo perseguidor en términos de rodaje. La amenaza del motor germano es palpable entre la competencia, y es que lejos de conformarse con imponer otro dominio en la categoría, su responsable de motores cree que las prestaciones máximas de potencia podrían llegar a alcanzar los 1630 caballos de potencia.
“El límite máximo rendimiento de estos V6 Turbo, si alcanzáramos una eficiencia térmica del 100%, sería de 1630 caballos de potencia, ¡esa sería la perfección!, y nadie nos impide buscarla", ha destacado Andy Cowell, quien insiste en que alcanzar semejante status competitivo conllevará “duro trabajo, soluciones innovadoras y tiempo” dentro del ambicioso plan de desarrollo que plantea Mercedes en la nueva era de los motores V6 Turbo.
El límite de rendimiento, si alcanzáramos una eficiencia térmica del 100%, sería de 1630CV
De vuelta a la realidad de 2015, Cowell ha revelado que la unidad de potencia que incorporan a sus monoplazas supone un paso hacia adelante con respecto al modelo desarrollado durante el 2014 que les permitió ganar 16 de las 19 carreras puntuables del calendario. Las expectativas de cara a la nueva temporada son altas, si bien son conscientes de que la reducción del número de unidades permitidas por temporada puede truncar su línea ascendente de rendimiento.
“Hace un año, todos los fabricantes estaban centrados en rodar con la nueva unidad de potencia y ampliar su kilometraje en el primer día de entrenamientos. Por ello, lo de 2015 ha sido una evolución, aunque no podemos subestimar el hecho de que sólo podemos utilizar cuatro unidades por piloto a lo largo de la temporada. Y para ello, tenemos una carrera más, 20, y no 19 como en 2014. Los motores, por ello, deben ser un 25% más duraderos”, ha manifestado.
La clave del éxito de Mercedes AMG estriba en no parar de buscar nuevas variables de rendimiento que optimicen el funcionamiento de la unidad de potencia, todo ello sin conformarse con los éxitos de 2014. Por ello, algunas partes como la refrigeración o el sistema de frenos han sido mejoradas con el objetivo de asentarse nuevamente como la referencia absoluta de la Fórmula 1.
“En cuanto a rendimiento, no nos hemos relajado en invierno o hemos dicho que ya no teníamos que hacer nada porque éramos los mejores. Hemos evolucionado cada aspecto del motor bajo lupa con el objetivo de mejorar nuestro rendimiento. Hemos optimizado la eficiencia de frenado y mejorado la refrigeración, no solo gracias a otro sistema de software, sino también gracias a los medios de enfriado. Al final, son solo pocas cosas las que hemos mantenido de 2014”
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