La única certeza en Montmeló con McLaren-Honda es que el equipo estrena pintura en el coche y que Honda ha colocado un pequeño hospitality para los suyos en los circuitos. De si el coche va a correr más, nadie se moja. Fernando mandaba mensajes de optimismo y Eric Boullier echaba agua a la hoguera.
Honda ha descartado usar alguno de sus nueve créditos para esta carrera. Las mejoras son en la electrónica del motor, en la gasolina y en fiabilizar piezas construidas debilmente. Entienden que hasta que el motor no se ponga al cien por cien de potencia sin romperse, no merece la pena empezar a usar sus comodines. Aquí estrenarán el tercero de los cuatro motores reglamentarios antes de las sanciones, pero con la misma especificación del inicio.
Mercedes se siente con ventaja y tampoco usará alguno de los 7 que le quedan. Es más quieren estirar aún su primer motor, el de Australia. Ferrari, que dispone de 10 tokens y Renault, de 12, tampoco los gastarán todavía.
Viniendo de ser undécimos en Bahréin, lo lógico es pensar que con una ligera mejora, si las piezas nuevas del resto del coche encajan, McLaren entrará en los puntos por fin, pero el salto mayor en el propulsor tendrá que esperar.
Cuentan que Ron Dennis no está nada satisfecho con aplazar la llegada de resultados, ni tampoco con que se separen los japoneses de los ingleses en el paddock, aunque sea para comer. Es verdad que Renault tambien tiene su camión, pero se corre el riesgo de que la falta de resultados cree clanes.
Fuente: app para dispositivos móviles del diario deportivo marca