La FIA sigue con su persecución sobre el flujo de combustible, que considera que puede estar siendo sobrepasado por algunos equipos, y ha enviado una carta a todas las escuderías avisando de la nueva normativa que aplica a partir de esta carrera.
Desde principios de temporada, la FIA ha observado que el sensor que mide el flujo de gasolina puede no contemplar acumulaciones parciales de combustible entre el sensor y los inyectores, lo que permitiría picos de potencia superiores a los permitidos en el motor.
Aunque el límite se mantiene a 100 kg/h, el máximo organismo exige que el consumo sea constante y prohíbe a partir de ahora que se produzcan picos de consumo o cambios de presión por encima de 90kg/h.
Ha de permanecer constante entre los sistemas de alta y baja presión con ese caudal, lo que puede afectar a los equipos que más habían logrado torear este sistema. Se habla, especialmente, de Ferrari y también Mercedes.
Fuente: app para diapositivos moviles del diario deportivo marca